Cosecha del Opio




En los días sucesivos a la caída de la flor, cuando la cápsula ha llegado a su máximo tamaño y las puntas de la corona situada sobre las cabezas están levantadas, se procederá a realizar uno o varios cortes, casi superficiales, con una cuchilla en cada una de las cabezas con cuidado de solo cortar la pared exterior, para evitar que el Opio sea reabsorbido al interior de la cápsula, perdiéndolo.


De estos cortes fluirá un látex de color blanco que en contacto con el aire se irá tornando oscuro hasta casi negro; esta sustancia una vez secada es lo que conocemos como OPIO.


Se pueden realizar los cortes temprano por la mañana, dejando secar el látex en la propia planta durante 1 o 2 días, para que pierda gran parte de la humedad antes de recogerlo. Esta operación se podrá repetir varias veces con intervalos de 3-4 días.